Como un tributo a todas las mamás de la Sociedad de Escuelas Católicas Santo Tomás de Aquino publicamos los testimonios de una profesora y de dos apoderadas.
Madre y educadora ejemplar
En la reciente celebración de los 146 años de la Sociedad de Escuelas Católicas Santo Tomás de Aquino recibió el Premio Espíritu Santo Tomás, en representación del colegio Santa Marta, el martes 19 de abril. Días antes había obtenido la asignación Excelencia Pedagógica por parte del Ministerio de Educación. Se trata de la profesora Jessica Morales, casada, dos hijos, Educadora de Párvulos, egresada de la Universidad Raúl Silva Henríquez.
En 2005 ingresó al Colegio Santa Marta, destacando por valioso trabajo y por la forma pedagógica de desarrollar sus clases. “Siempre ha estado presente en su trabajo la entrega de afecto y valores que son parte imprescindible de la formación integral de nuestros niños y niñas”, señalan sus compañeras. Y agregan: “Como mamá destaca por su preocupación y entrega total a sus dos hijos, el mayor titulado de Ingeniería Civil Industrial y el menor cursa séptimo básico. Es una mamá orgullosa y feliz”.
Mi hermoso Jesús
Testimonio de Carmen Acuña, mamá del alumno Jesús Castro Acuña, del 6º B dela Escuela Nuestra Señora del Carmen.
“Lejos ser mamá es lo mejor que me ha pasado. Mi hijo ha sido un regalo de Dios. Yo fui madre mayor, a los 35 años. Era tía de muchos sobrinos de sangre y por vocación mamá de ellos. Por la edad ya pensaba que no iba a experimentar la maternidad, hasta que después de mucho tiempo y sin buscar llegó un hombre maravilloso que al poco tiempo de estar juntos conocimos la gran noticia que seríamos padres. Y más aún Yo sería madre por primera vez. Y ahí la alegría se hizo inmensa. Todos estábamos muy contentos ya que la gran tía Carmen sería mamá. Podría escribir mucho sobre mi experiencia de mamá pero lo más importante, lo esencial es la gran historia de mi hermoso hijo Jesús”.
Catalina Chávez Morales, mamá a los 19 años.
Apoderada de la Escuela Nuestra Señora del Carmen
Ser madre...es lo mejor que me pudo pasar. Fui mamá joven, a los 19 años. Nos costó acostumbrarnos y nos ha seguido costando, pero hemos salido adelante. Ser madre es amar, proteger, educar, cuidar, ese regalo tan preciado que el Señor nos mandó. Yo tengo 24 años y soy feliz con mis 2 hijas, mis 2 mayores amores y felicidad en esta vida”.
Fuente: Comunicaciones Colegio Santa Marta, Comunicaciones Escuela Nuestra Señora del Carmen