El Sacerdote español Ángel Viñas se reunió en el Liceo Sara Blinder con los encargados de calidad y autoridades para intercambiar algunas ideas e introducir el tema de la certificación ISO 9001. Hizo
Muy ameno en su exposición y convencido de que el cambio de los modelos de gestión son procesos que efectivamente ayudan a recoger buenas prácticas para mejorar la eficiencia en la gestión de las organizaciones, se presentó el Padre Angel Viñas en su primer encuentro con profesionales de la Fundación SECST.
Enfatizó que “lo más importante es hacerse cargo de los procesos internos y mejorar las comunicaciones. Es necesario conocer aquellos aspectos que producen la resistencia, propia de este tipo de procesos. Destacó que finalmente la comunidad que se queda es aquella que logra incorporar la identidad de la organización, que sigue el mismo mensaje”.
Lo primero que hicieron en la Congregación española, fue realizar un diagnóstico de la situación de la organización. Se detectaron problemas que ponían en riesgo la estabilidad de la organización, lo que obligó a concentrar los esfuerzos para cambiar ese modelo. No estaba funcionando. “Antes de iniciar el proceso de cambio en el modelo, éramos una organización que tenía dos retos: habían problemas financieros importantes, había una alta deuda; estábamos perdiendo alumnos en la parte de bachillerato. Había que hacer una nueva planificación para que los estudiantes fueran al colegio; y, había un problema de identidad pastoral que debía ser resuelto”, señaló
Este diagnóstico fue suficiente para que la red de colegios de los SS.CC. asumiera el desafío de aprender de otros y poner en marcha un sistema donde hay cosas que no pueden pasar. Pusieron en el tapete la necesidad de ayudarse unos con otros, trabajar en equipo, conocer y replicar procesos en que todos aportan lo que tienen; no depende de la persona, sino de la organización. “Se introdujeron procesos de gestión eficiente, se definieron procedimientos, y se institucionalizaron buenas prácticas. Esta es la característica principal de la ISO 9001", dijo.
En términos de cómo se asumió la misión de la organización, se consideró cambiar la manera de gestionar y se entendía que la misión de evangelizar la tienen todos dentro de la comunidad. “Se deben mejorar los perfiles de contrataciones. El ideario estaba muy bien en el papel, pero a veces no llegaba al aula de matemática, naturales; sólo llegaba hasta la capilla porque se entendía que esto es un mundo aparte”. Este proceso, destaca, ha ayudado internamente y hacia afuera. “Lo más importante ha sido validar nuestra misión en la sociedad civil y para eso estuvimos 10 años trabajando en este proyecto”
UN PROCESO DE CRECIMIENTO, COMPROMISO Y CONFIANZA
Sin duda, el padre Angel Viñas, ha logrado transmitir que estos procesos no están exentos de dificultades. Los problemas no desaparecen para siempre pero el liderazgo de los rectores siempre es fundamental para seguir creciendo como organización. “En los últimos tres años se ha resuelto una serie de problemas. Desde la viabilidad del proyecto educativo hasta tener un número alto de catequesis. "Esto para nosotros es un indicador en el plan de pastoral. Todos estos logros han dado solidez a la organización, porque nuestra misión es evangelizar”, concluyó.
En este contexto, el liderazgo de los directores entonces es fundamental. “Es importante transmitir a la comunidad que el trabajo se basa en el paradigma de la confianza y no de la desconfianza. Cuando hay confianza, señala el Padre la información fluye. Estamos todos, la comunidad completa y no sólo los directores, en la misma dirección. “El trabajo no tiene horarios. El que está comprometido no mira la hora y eso se produce a partir de un buen liderazgo”.